ES AHORA
Ahora es cuando tenemos que vivir, cuidarnos y aprender. No dentro de 5 años. No podemos esperar los efectos a largo plazo de las leyes que se establecen.
No podemos seguir contando solo con las acciones judiciales para disuadir a los defraudadores. Las investigaciones se alargan años y con ellas, los riesgos de que el reconocido culpable no nos indemnice ni pague jamás. Fijaos, por ejemplo, en el caso Bankia que la propia gente de nuestra Red Ciudadana está luchando por esclarecer con la querella @15mPaRato.
Las deudas de los estados reposan sobre terrenos pantanosos. Un simple movimiento y en un segundo desaparecen millones de euros.
Nos dicen “Los bancos son frágiles, hay que ayudarlos” y a esto me refiero cuando digo “reposar sobre terrenos pantanosos”.
Nuestras deudas descansan en bancos: están en manos de gente que no nos protege lo más mínimo. La opacidad financiera permite que nuestro dinero desaparezca. El sistema financiero permite que el rastro de nuestro dinero desaparezca y luego finge que lo hemos perdido, o peor aún: que lo debemos.
¡Qué gran idea hacernos pagar varias veces un dinero que no volveremos a ver jamás!
Pero el dinero no desaparece, simplemente cambia de manos, el problema es que nosotros perdemos el rastro. Conozco más de un caso en el que clientes ricos no saben ni en qué país se encuentra su dinero, de ello se encarga su gestor.
Hay que cambiar las cosas ahora.
Y sólo con una victoria en Europa podremos tener mayor fuerza y cambiar la manera de hacer las cosas. No dentro de varios años sino ahora, pues es ahora cuando lo necesitamos. Pues es ahora cuando ellos nos piden más y más esfuerzos.
Ahora es cuando están dejando que todo se venga abajo mientras el dinero “desaparece”.
Debemos concentrarnos y priorizar:
- La injusticia de las rentas del capital respecto a los rendimientos del trabajo.
- El control de las finanzas.
- El conocimiento del verdadero estado de nuestra riqueza.
Necesitamos información para dejar de padecer sus mentiras, para dejar de ser llevados de la mano como niños, para quitarnos de una vez la venda de los ojos.
La información es primordial tal como gritasteis en España en todas las calles ese 15 de Mayo de 2011 “no ser mercancía en manos de políticos y banqueros”. No somos mercancía, actuemos en consecuencia: participemos de nuestra sociedad. Una sociedad de solidaridad, responsabilidad y conocimiento.
Conocimiento de lo que pasa en nuestros puestos de trabajo, en nuestras administraciones y en nuestros bancos.
El conocimiento es la condición bajo la cual deben tomarse las opciones políticas, las industriales y financieras, teniendo como base el interés ciudadano. No olvidemos que la realidad del caso Blesa se conoce gracias a la Red Ciudadana, gracias a su coraje.
Debemos avanzar con el espíritu de compartir el conocimiento y la información. No se puede esperar a que las leyes cambien y nos protejan mejor para hacerlo. Podemos empezar a protegernos compartiendo la información y coordinando mejor nuestras competencias.
Es el momento de un esfuerzo común. De nuevo, es el momento de salir a las calles, pero para votar y continuar el cambio, para crear nuestra sociedad a diario, más allá de los periodos electorales.
El diálogo sobre nuestros destinos no puede seguir haciéndose sin que estemos informados y sin que participemos activamente.
El futuro de nuestro dinero y de nuestros empleos no puede volver a decidirse sin nosotros.
Este es el sentido de la Democracia real: estar informados es requisito previo para luchar contra la injusticia. ¿Saben que tan solo con el fraude en el IVA que hacen las grandes empresas se pierden millones de euros cada año? ¿Algún político lo menciona o nos lo recuerda? ¿Quieren saber qué país se preocupa más por ello? Bélgica. Y espero que muy pronto podamos decir que también España.
Nuestra sociedad se forma en el día a día, en nuestro trabajo, en nuestros votos. La información total y completa es la condición para nuestra libertad y nuestra dignidad.